El stock de clínker en la fábrica de Villeta de la Industria Nacional del Cemento (INC) es cero, hecho que le obliga a reducir a su mínima expresión sus suministros. La estatal atiende hoy menos del 50% de la demanda local.
El director de la fábrica de Villeta, Silvio Delgado, fue muy claro al decir que “todo lo que llega vuelve a salir”, haciendo referencia a que al descargar una barcaza de clínker en la planta se procede de inmediato a molerlo para la producción de cemento.
En la fábrica de esta ciudad se encuentra el molino principal de la INC, en tanto que en Vallemí, donde se encuentra el horno de clínker, hay un pequeño molino. En Concepción hay un punto de despacho y actualmente el depósito de Sajonia de la estatal también es utilizado para entregas.
Los despachos en los frentes mencionados, del 1 al 14 de diciembre, se pueden observar en el cuadro de la derecha, que fue proveído por la cementera.
El día 15 de este mes entregaron 15.000 bolsas en los tres frentes, mientras que ayer tenían previsto una entrega similar, de acuerdo con los datos oficiales.
Estas mínimas cantidades resultan insignificantes si se tiene en cuenta que el mercado de la construcción está demandando hasta 80.000 bolsas de cemento por día.
Según los registros, el despacho promedio diario de la estatal rondaría las 35.323 bolsas de cemento, que es apenas el 44 por ciento de los requerimientos locales.
Pero el problema no es solamente la disminución en las entregas, sino también la provisión a personas que no tienen ninguna relación con el sector. De acuerdo con las denuncias de los distribuidores, políticos y amigos de las autoridades de la INC son los que acceden al cemento en detrimento de los “depositeros” formales.
Este suministro irregular es el causante del aumento de los precios, que actualmente oscilan entre 65.000 y 80000 guaraníes por bolsa. En el interior del país ese precio alcanza hasta 100.000 guaraníes por bolsa. El valor normal del material de construcción oscila entre 38.000 y 42.000 guaraníes.
Según los distribuidores los precios normales son impracticables porque ellos tampoco consiguen el material con los valores usuales. Mientras que el precio en puerta de INC es 35.000 guaraníes, los “depositeros” están consiguiendo a 60.000 guaraníes de los revendedores, ya que de la estatal no consiguen provisión desde hace semanas.
Escaso fueloíl
No solo escasea el clínker para la molienda, sino también hay un mínimo stock de fueloíl, necesario para el funcionamiento del horno de INC. Según técnicos de Vallemí, se tiene combustible para elaborar el insumo hasta el 26 de este mes y no está asegurada la posterior provisión, porque no hay novedades de un cargamento en camino.
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